La final fue un poema para
el fútbol. Un equipo decidió jugar y lo hizo de manera magnífica. El
otro no supo qué hacer y se metió atrás, siempre arrinconado y dominado
por los españoles. El resultado fue un reflejo de los noventa minutos. Dicen que el campeón es siempre el mejor equipo. Muchas veces, esa
afirmación es cuestionada y totalmente discutible. Esta vez no. España
volvió a ser el mejor dentro de la cancha y continuando con un ciclo
brillante, se adjudicó la Eurocopa 2012. Fue tras golear en la final a
Italia por 4-0, en un encuentro disputado en Kiev, Ucrania, una de las
sedes del torneo.
![La foto final del merecido campeón. (EFE)](http://www.clarin.com/deportes/foto-final-merecido-campeon-EFE_CLAIMA20120701_0210_29.jpg)
Primero,
a los 13, David Silva dio una muestra de ello, al cabecear un centro
atrás de Cesc, tras un pase profundo de Xavi Hernández. Hasta ahí,
Italia insinuaba pelear de igual a igual, presionando bien arriba y
cortando los circuitos de juego. Pero un descuido, una corrida al fondo y
un cabezazo casi de casualidad liquidaron la historia.
El
segundo, producto del dominio arrollador de España, llegó por intermedio
de Jordi Alba a los 40 de esa misma primera etapa. Xavi puso un
fenomenal pase entre los defensores y el nuevo jugador del Barcelona
definió con tranquilidad en el mano a mano con Buffon.
Pese a la
ventaja 2-0, España no salió relajada en el segundo tiempo. Al
contrario, pisó el campo de juego buscando el tercero, que recién iba a
llegar en el final. A los 38, Fernando Torres, quien había ingresado
hacía instantes, definió de manera brillante ante la salida del arquero
para marcar el tercero. Gran pase de Xavi.
Y había más. A los 42,
Torres fue el que esta vez se disfrazó de asistidor y le sirvió el
cuarto a Mata. La frutilla del postre. La frutilla del postre. El final
de una Italia, que lejos estuvo de ser la de todo el torneo, esa que
decidió olvidarse del Catenaccio para demostrar pasajes de buen fútbol.