domingo, 17 de marzo de 2013

El Papa Francisco y su primer angelus

Ante una multitud en la Plaza de San Pedro, el Papa encabezó el primer rezo dominical de su Pontificado. "No nos cansemos nunca de perdonar", dijo. 


Se estima que asistieron más de 100 mil personas. Con la sencillez que caracteriza su Pontificado desde el miércoles, Jorge Bergoglio se asomó a la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico Vaticano a las 8 en la Argentina y fue recibido por una ovación.
"El rostro de Dios es el de un padre misericordioso. Siempre tiene paciencia con vosotros, los comprende y los entiende, no se cansa de perdonarlos si volvemos a él arrepentidos", fue el eje de su primer mensaje dominical.
Allí, volvió a pedir a la multitud que rezara una plegaria por él y habló de la importancia de "encontrarnos los domingos". La gente desbordó largamente la Plaza de San Pedro, lo que confirma el entusiasmo que está despertando en los fieles el pontífice argentino. La inusual asistencia prenuncia una gran concurrencia a la toma de posesión del nuevo Papa, que se realizara este martes. En su breve mensaje, Francisco mencionó el pasaje bíblico en el que Jesús salva de la condena a muerte a una mujer adúltera. Y elogió un libro del cardenal alemán Walter Kasper (La misericordia: clave del Evangelio y de la vida cristiana), que asegura que "un poco de misericordia vuelve al mundo menos frío y más justo".